Vuelve, tras un largo parón, la tercera entrega de este "Pushing Daisies, episodio a episodio". Esta vez, la cosa va de perros, caballos y nuevos e inquietantes crímenes por resolver.| Episodio 1.05: Cerrando el círculo |
Es la noche de Halloween y el presunto fantasma de un jinete muerto está asesinando a aquellos jinetes que causaron su fallecimiento. Lo peor de todo esto es que Olive, que en su día compitió en carreras, fue una de esos jinetes que se vieron involucrados en esa trágica muerte.
Aunque la cosa no pinta nada bien para ella, Olive cree conocer el secreto de Chuck y su intención es decírselo a un Ned que no atraviesa sus mejores momentos a cusa de los malos recuerdos que le trae Halloween. Para colmo, Emerson descubre que el secreto de Chuck está en el aire.
Han pasado muchas semanas desde que viese y comentase los cuatro primeros episodios de la temporada. Hasta ese momento, la serie me parecía un producto muy original (aunque con claras influencias del cine de Tim Burton) y entretenido.
En esta segunda vuelta, la serie no solo mantiene ese gran nivel, sino que he podido sobrellevar mucho mejor su alto contenido en azúcar ("Pushing Daisies" es pastelera y remilgada como pocas).
En lo que refiere al episodio, me ha encantado que la gran protagonista haya sido Olive y su pasado como jinete. Además, han sabido aprovechar muy bien la excusa de episodio especial de Halloween para hacer algo más oscuro y siniestro, al más puro estilo "Sleepy Hollow".
También ha estado bastante acertada la historia de Ned y su fobia a Halloween, enlazando los recuerdos de niño con lo acaecido en el presente.
Por último, el enfrentamiento entre Chuck y Olive se convierte en una incipiente amistad entre ambas. Olive comprende la situación de Chuck, o lo que ella cree que le ocurre a Chuck, y se compromete a no revelar su secreto, o lo que ella cree que es su secreto.
No obstante, esta no puede reprimir sus sentimientos hacia Ned y tras ser rescatada por este, no duda en besarle. ¿Qué consecuencias traerá?
| Episodio 1.06: Perras |
Cuando un criador de perros aparece muerto y todas las sospechas recaen en su esposa Emerson da el caso casi por cerrado. El problema está en que la víctima era polígamo y a falta de una esposa tenía cuatro, lo cual complica hasta el infinito la situación.
Mientras tanto, Olive y Ned están confusos por el beso que se dieron la noche anterior. Él no para de tener tórridos sueños con Chuck y Olive y ella se debate entre el amor de su vida y su recién empezada amistad con Chuck.
El pastelero tendrá que valorar si es mejor un amor platónico y sin contacto, o un amor pasional y sin sentimientos.
Divertido episodio centrado en el asesinato de un criador de perros y en las consecuencias del beso entre Olive y Ned.
En lo referente al caso, tanto los motivos de la muerte, como la posterior investigación con los protagonistas infiltrados (Emerson caen en los embrujos de una adiestradora, Ned aprovecha la presencia de una psicóloga de perros para exponer su dilema emocional, Chuck es descubierta en menos de dos minutos y Olive se convierte en una improvisada fanática de la moda canina) y la excusa del mestizaje perfecto, resultan tan divertidísimas como subrealistas.
Por otra parte, los sentimientos de Ned hacia Chuck se ven descontrolados tras el beso de Olive. Ya no ve a su amada como un luminoso ángel, sino que la ve como la bella y atractiva mujer que es y eso le hace dudar entre si es mejor amar a una mujer a la que jamás podrá tocar o a otra, en este caso Olive, que sea todo pasión y lujuria.
Como era de esperar, Ned elije a Chuck y es que ¿qué sería de "Pushing Daisies" sin esa bonita historia de amor?
Para terminar, y fuera de este episodio, he de decir que me encantan esos fragmentos que cuentan la vida del pequeño Ned y que abren cada episodio. La puesta en escena, la maravillosa voz en off que narra esos párrafos que en ocasiones acaban en rima y el joven actor que interpreta a nuestro protagonista en su época infantil, son de lo mejor de cada episodio.
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